La reciente ralentización en la producción de bloques en la red de Solana no obedece a un fallo técnico, sino al “delayed packing” (empaquetado retrasado) realizado por los validadores para maximizar sus beneficios. Proyectos como Jito, Marinade y Anza trabajan en soluciones a nivel de protocolo—como la introducción de sanciones mediante mecanismos de gobernanza y la reducción de los periodos de gracia—con el objetivo de restablecer el rendimiento y la eficiencia de la red.