Antes de que el eth subiera, la gente opinaba que Vitalik era: un empollón, socialmente torpe, vestido descuidadamente, hablaba como un prompt de salida de AI, todo el día ocupado con rollup, zkp, sin hacer cosas serias, y la fundación eth vendía moneda de vez en cuando, no parecía haber un bull run en absoluto.
Después de que eth sube, la gente evalúa a vitalik como: un genio geek, con un pensamiento puro, reservado y que se eleva por encima del bullicio del mercado, siendo un "príncipe filósofo" raro en la industria de las criptomonedas. La fundación eth entiende cómo invertir en flujos de efectivo, controlando el ritmo; en un bull run, quienes más ganan son estas personas.
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Antes de que el eth subiera, la gente opinaba que Vitalik era: un empollón, socialmente torpe, vestido descuidadamente, hablaba como un prompt de salida de AI, todo el día ocupado con rollup, zkp, sin hacer cosas serias, y la fundación eth vendía moneda de vez en cuando, no parecía haber un bull run en absoluto.
Después de que eth sube, la gente evalúa a vitalik como: un genio geek, con un pensamiento puro, reservado y que se eleva por encima del bullicio del mercado, siendo un "príncipe filósofo" raro en la industria de las criptomonedas. La fundación eth entiende cómo invertir en flujos de efectivo, controlando el ritmo; en un bull run, quienes más ganan son estas personas.