Trump vuelve a hablar sobre la permanencia de Powell: la perturbación del mercado y el juego político de la independencia de la Reserva Federal
La insatisfacción de Trump con Powell ha existido durante mucho tiempo, y su núcleo radica en que él cree que la política monetaria de la Reserva Federal (como el aumento de las tasas de interés) obstaculiza su agenda económica. Él prefiere que la Reserva Federal adopte una política monetaria más flexible para estimular el crecimiento económico y el aumento del mercado de valores.
Los comentarios de Trump dejan claro que espera que la posición del presidente de la Reserva Federal esté en alta sintonía con sus objetivos económicos como presidente. Esta es una manifestación típica de la instrumentalización del banco central para servir a intereses políticos a corto plazo.
"Dijeron que esto perturbaría el mercado" es la clave. Muestra la evaluación estratégica de Trump entre expresar su deseo personal y evitar provocar inmediatamente un caos en los mercados financieros. Él es muy consciente de que forzar la destitución de Powell durante su mandato sería visto como un ataque abierto a la independencia de la Reserva Federal, lo que podría llevar a un colapso de la confianza de los inversores y provocar una gran caída en la bolsa. Esto va en contra de la "prosperidad" que espera ver.
La independencia de la Reserva Federal es la piedra angular de su credibilidad y efectividad. Permite a los responsables de la Reserva Federal formular políticas monetarias basadas en datos económicos en lugar de presiones políticas. Si la permanencia del presidente de la Reserva Federal depende de las preferencias personales del presidente, entonces las decisiones de la Reserva Federal serán vistas como el resultado de una intervención política, y no basadas en un análisis económico profesional. Esto dañaría gravemente la credibilidad de la Reserva Federal, haciéndola perder la confianza del mercado al enfrentar desafíos como la inflación. La experiencia histórica muestra que cuando los bancos centrales ceden a la presión política, tienden a adoptar políticas monetarias excesivamente expansivas, lo que lleva a la inflación fuera de control. Esta es también una de las principales razones por las cuales los bancos centrales de todo el mundo buscan la independencia. El mercado depende en gran medida de la certeza de las políticas de la Reserva Federal. Si la posición de un presidente de la Reserva Federal puede cambiar en cualquier momento por razones políticas, esto generará una gran incertidumbre en el mercado, afectando las decisiones de inversión y la planificación a largo plazo.
A pesar de que Trump ha declarado que esperará hasta el final del mandato de Powell, sus comentarios ya han transmitido una señal clara, afectando al mercado y a las futuras políticas de la Reserva Federal. Los comentarios de Trump podrían hacer que el mercado comience a anticipar la posibilidad de que Powell sea reemplazado después de que termine su mandato. Esto generará discusiones y especulaciones sobre la dirección futura de la política de la Reserva Federal. Aunque el mandato de Powell podría no terminarse anticipadamente, esta presión pública proveniente de la Casa Blanca sin duda lo enfrentará a una situación más compleja en sus próximas decisiones políticas. Independientemente de si Powell es finalmente reemplazado, este evento se convertirá en un importante legado político. Muestra claramente la tensión entre el poder político y la autoridad en la formulación de políticas monetarias, y podría seguir afectando el debate sobre la independencia de los bancos centrales en Estados Unidos y en el mundo.
Los comentarios de Trump sobre Powell no son simplemente una simple rencilla personal, reflejan la profunda contradicción entre los políticos al perseguir objetivos económicos y la independencia de la Reserva Federal. Elegir esperar hasta el final de su mandato para tomar decisiones es una elección racional que pesa la estabilidad del mercado a corto plazo frente a los objetivos políticos a largo plazo. Estas declaraciones son por sí solas suficientes para alertar al mercado y enfatizan nuevamente cuán crucial es la independencia de la Reserva Federal para mantener la estabilidad financiera y la confianza de los inversores en un entorno macroeconómico incierto.
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Trump vuelve a hablar sobre la permanencia de Powell: la perturbación del mercado y el juego político de la independencia de la Reserva Federal
La insatisfacción de Trump con Powell ha existido durante mucho tiempo, y su núcleo radica en que él cree que la política monetaria de la Reserva Federal (como el aumento de las tasas de interés) obstaculiza su agenda económica. Él prefiere que la Reserva Federal adopte una política monetaria más flexible para estimular el crecimiento económico y el aumento del mercado de valores.
Los comentarios de Trump dejan claro que espera que la posición del presidente de la Reserva Federal esté en alta sintonía con sus objetivos económicos como presidente. Esta es una manifestación típica de la instrumentalización del banco central para servir a intereses políticos a corto plazo.
"Dijeron que esto perturbaría el mercado" es la clave. Muestra la evaluación estratégica de Trump entre expresar su deseo personal y evitar provocar inmediatamente un caos en los mercados financieros. Él es muy consciente de que forzar la destitución de Powell durante su mandato sería visto como un ataque abierto a la independencia de la Reserva Federal, lo que podría llevar a un colapso de la confianza de los inversores y provocar una gran caída en la bolsa. Esto va en contra de la "prosperidad" que espera ver.
La independencia de la Reserva Federal es la piedra angular de su credibilidad y efectividad. Permite a los responsables de la Reserva Federal formular políticas monetarias basadas en datos económicos en lugar de presiones políticas. Si la permanencia del presidente de la Reserva Federal depende de las preferencias personales del presidente, entonces las decisiones de la Reserva Federal serán vistas como el resultado de una intervención política, y no basadas en un análisis económico profesional. Esto dañaría gravemente la credibilidad de la Reserva Federal, haciéndola perder la confianza del mercado al enfrentar desafíos como la inflación. La experiencia histórica muestra que cuando los bancos centrales ceden a la presión política, tienden a adoptar políticas monetarias excesivamente expansivas, lo que lleva a la inflación fuera de control. Esta es también una de las principales razones por las cuales los bancos centrales de todo el mundo buscan la independencia. El mercado depende en gran medida de la certeza de las políticas de la Reserva Federal. Si la posición de un presidente de la Reserva Federal puede cambiar en cualquier momento por razones políticas, esto generará una gran incertidumbre en el mercado, afectando las decisiones de inversión y la planificación a largo plazo.
A pesar de que Trump ha declarado que esperará hasta el final del mandato de Powell, sus comentarios ya han transmitido una señal clara, afectando al mercado y a las futuras políticas de la Reserva Federal. Los comentarios de Trump podrían hacer que el mercado comience a anticipar la posibilidad de que Powell sea reemplazado después de que termine su mandato. Esto generará discusiones y especulaciones sobre la dirección futura de la política de la Reserva Federal. Aunque el mandato de Powell podría no terminarse anticipadamente, esta presión pública proveniente de la Casa Blanca sin duda lo enfrentará a una situación más compleja en sus próximas decisiones políticas. Independientemente de si Powell es finalmente reemplazado, este evento se convertirá en un importante legado político. Muestra claramente la tensión entre el poder político y la autoridad en la formulación de políticas monetarias, y podría seguir afectando el debate sobre la independencia de los bancos centrales en Estados Unidos y en el mundo.
Los comentarios de Trump sobre Powell no son simplemente una simple rencilla personal, reflejan la profunda contradicción entre los políticos al perseguir objetivos económicos y la independencia de la Reserva Federal. Elegir esperar hasta el final de su mandato para tomar decisiones es una elección racional que pesa la estabilidad del mercado a corto plazo frente a los objetivos políticos a largo plazo. Estas declaraciones son por sí solas suficientes para alertar al mercado y enfatizan nuevamente cuán crucial es la independencia de la Reserva Federal para mantener la estabilidad financiera y la confianza de los inversores en un entorno macroeconómico incierto.