Bitcoin y oro: la relación gemela en el nuevo Sistema Monetario Internacional

Recientemente, los mercados de capitales globales han experimentado una fuerte volatilidad, el yen se ha apreciado provocando un cambio en las operaciones de arbitraje, el índice VIX se ha disparado, e incluso el oro ha sufrido un ligero retroceso debido a algunos choques de liquidez. Bitcoin ha caído drásticamente junto con los activos de riesgo, lo que parece contradecir su atributo de "gemelo". Sin embargo, seguimos creyendo firmemente que, a medida que avanza la evolución del nuevo Sistema Monetario Internacional, la relación gemela entre Bitcoin y el oro se volverá más estrecha.

A lo largo de la historia, desde 1970, el precio del oro (en dólares) ha experimentado tres ciclos principales de aumento. La década de 1970 fue la verdadera "edad de oro", con un aumento máximo del oro en dólares de más de 17 veces. Este período coincidió con la disolución del Sistema de Bretton Woods, la desvinculación del dólar del oro, junto con dos crisis del petróleo y tensiones geopolíticas, lo que permitió que las propiedades de conservación de valor y refugio del oro se manifestaran plenamente. Después de la década de 1980, el precio del oro entró en una fase de consolidación, debilitándose en la década de 1990, lo que corresponde al control de la inflación global y a la recuperación del crecimiento económico.

La primera década del siglo XXI fue testigo de un segundo ciclo de aumento, con el precio del oro frente al dólar aumentando más de 5 veces. Durante este período, estalló la burbuja de Internet, la incorporación de China a la Organización Mundial del Comercio generó expectativas de inflación, y la crisis de las hipotecas subprime junto con la crisis de la deuda europea llevaron a los bancos centrales de los países desarrollados a iniciar políticas de expansión cuantitativa ilimitada. Después de 2010, con el dólar recuperando su impulso y Estados Unidos reduciendo la expansión cuantitativa y aumentando las tasas de interés, el oro volvió a entrar en un período de consolidación de diez años.

Actualmente estamos en el tercer ciclo de aumento, que comenzó en 2019, con un aumento del precio del oro frente al dólar cercano al 100%. Este ciclo se puede dividir en dos fases: desde finales de 2018 hasta principios de 2022, afectado por el aumento de las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos y la pandemia de COVID-19, las políticas monetarias de los países se han flexibilizado drásticamente, y las tasas de interés reales han caído rápidamente; desde 2022 hasta ahora, en la era pospandémica, a pesar de que Estados Unidos ha aumentado las tasas de interés rápidamente para hacer frente a la alta inflación, el precio del oro aún ha subido más del 30%.

La economía tradicional sostiene que el precio del oro está significativamente inversamente relacionado con las tasas de interés reales, pero este marco parece no ser aplicable en la era posterior a la pandemia. El verdadero valor del oro radica en el "consenso", y su fenómeno de desvinculación del marco de precios de las tasas de interés reales refleja una respuesta al período de transición hacia un nuevo Sistema Monetario Internacional, que esencialmente refuerza la "consenso" de la propiedad monetaria del oro.

Los bancos centrales y el sector privado a nivel global están diversificando el riesgo del dólar mediante la acumulación de oro. Desde 2020, la compra neta de oro por parte de los bancos centrales ha aumentado considerablemente, y las tenencias de ETF de oro en Asia también han subido de manera significativa, lo que refleja las expectativas sobre la diversificación y evolución del Sistema Monetario Internacional.

Bitcoin y el oro tienen muchas similitudes, como la escasez, la descentralización, la imposibilidad de falsificación, la divisibilidad y la conveniencia. En enero de 2024, la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. aprobó la cotización de los primeros ETF de Bitcoin, marcando un avance de Bitcoin hacia la corriente principal. En los últimos años, la correlación positiva entre los precios de Bitcoin y el oro ha aumentado significativamente, lo que sugiere que podría estar evolucionando de un activo de alto riesgo a una "moneda de mercancía".

A medida que miramos hacia el futuro, el Sistema Monetario Internacional entrará en una nueva fase. Antes de que se establezca oficialmente el nuevo sistema, la tendencia hacia la diversificación de las monedas de reserva continuará, ocurriendo no solo a nivel nacional, sino también en el sector privado. Con el aumento del centro de inflación global y la creciente incertidumbre geopolítica, el oro seguirá manteniendo una tendencia alcista. Al mismo tiempo, el proceso de adopción del Bitcoin se está acelerando, y su valor como moneda de reserva probablemente avanzará junto al oro.